Por: Redacción|Cuarto Poder
Con la aprobación del “Plan B” de la reforma electoral, el debate y polarización generado desde hace varios meses, no han cesado. Ejemplo de ello, lo relacionado con temas laborales y es que el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, aseguró que no se afectan las facultades del Instituto Nacional Electoral (INE) ni habrá despidos masivos.
“La reforma electoral ha sido objeto de una serie de ataques, de una estrategia claramente diseñada desde las oposiciones, construida a base de falsedades. Ahí no es cierto que se le quiten facultades al Instituto Nacional Electoral o al Tribunal Electoral, por el contrario, desaparecen las facultades que tenían más Juntas Locales o las vocalías locales y se concentran todas en un solo procedimiento sancionador. No hay, como dicen algunos trasnochados, un despido masivo de aproximadamente 8 mil trabajadores”, mencionó el titular de SEGOB.
Lo que sí desaparece, aseguró, son los fideicomisos con los que cuenta el Instituto, recursos que deberán utilizarse para pagar las liquidaciones.
Agregó que, a lo muchos mil 200 trabajadores del INE, serán despedidos.
“En el caso de los despidos pues son básicamente, 32 por 2, serían 64 vocales de las Juntas Locales y mil 200 vocales de las que se llaman las Juntas Auxiliares. Ese es el universo de posibles despidos. No llega ni siquiera al 7, 8 por ciento del total de los 17 mil 500 trabajadores que aproximadamente tiene el Instituto Nacional Electoral”, explicó Augusto López.
El Plan B, explica, lo que hace es compactar las direcciones, que de 16 pasan a 7, elimina privilegios de lo que llamó la burocracia dorada y desaparece cargos de funcionarios que casi no hacían nada y ganaban entre 50 mil y 70 mil pesos mensuales.
Actualmente, los máximos órganos en materia de justicia como el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TRIFE) y la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), se encuentran revisando el tema como parte de los recursos de inconstitucionalidad interpuestos, por el propio INE y representantes de partidos políticos.
En ese sentido, el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, hizo un llamado a no confrontarse y esperar a que la Corte resuelva sobre la constitucionalidad del documento.
“Les diría a todos que no hay que precipitarse ni confrontarse ni polarizarse y menos insultarse y pelearse. Vamos a esperar a que la Corte resuelva en los próximos días”, dijo Monreal.
Recordó que en lo particular votó en contra del Plan B y hasta dividió el dictamen en 9 rubros, con 21 puntos posiblemente contrarios a la Constitución, pero aun así considera que hay elementos positivos en el documento y por ello insiste en que lo mejor es esperar a que los ministros de la Corte decidan.