Por: Redacción|Cuarto Poder
El Maestro en Gobierno y Administración Pública Municipal y Estatal, Horacio Villaseñor se refirió a la Agencia Metropolitana de Gestión Integral de Residuos, como un “proyecto basura” así lo dijo en su columna Un SIAPA de la basura, será basura publicada en el medio de comunicación a Fondo Jalisco.
Señala, entre otras cosas, que los problemas de uno no son problema de todos, ni deben resolverlo entre todos; además hace una crítica a la ineficiencia e incapacidad de los servidores públicos por atender los asuntos que aquejan a la población.
Para ello, explica cómo el SIAPA surgió como una opción viable y eficiente, pero que al transcurrir de los años fue decayendo hasta convertirse en un problema.
Muchas son las razones, técnicas y políticas, por las que proponer un sistema intermunicipal para el servicio de limpia es otra estupidez de algunos “gobernantes”, oportunistas o improvisados, que no saben administración pública. Su limitado entendimiento solo les da para tirar el dinero, de todos, en ocurrencias y fracasos públicos.
Cuando su incapacidad administrativa es evidente, en lugar de “aprender a aprender” y voltear a verse el ombligo, los directivos públicos de ahora tratan de justificar sus resultados adversos diciendo que hace falta coordinación con otras autoridades, metropolización o nuevas leyes, cuando lo único deficiente son ellos mismos.
Aclaremos primero, ¿cuál SIAPA será la referencia, para esa vacilada llamada SIAPA de la basura? ¿El que funcionó exitosamente, creado por el talentoso ingeniero, tapatío, Jorge Matute Remus o el actual, inútil e inservible? ¿El SIAPA, de ahora, que cada vez que llueve brotan las “fuentes de caca” y nos tiene, a todos, peatones y conductores, transitando sobre charcos de orines y excremento? Recordemos que el SIAPA de antes, reconocido internacionalmente por su efectividad que creó, mi tío, Jorge, premio nacional de ingeniaría, exrector de la Universidad de Guadalajara y presidente municipal de esta ciudad, entre muchas otras distinciones, sí servía.
Aquel SIAPA no nació improvisadamente, fue creado en 1978 por la mente brillante de quien, antes, en 1950 movió hacia atrás el edificio completo de la Compañía Telefónica Mexicana para que pudiera ampliarse la Avenida Juárez de la capital tapatía.
Ese SIAPA, exitoso, tenía como principal premisa proporcionar servicios que sí solucionaban, optimizando recursos para fortalecer las arcas municipales, en el entendido de que, constitucionalmente, son ellos los que tienen la obligación de garantizar el suministro del agua y drenaje suficiente en el municipio. ¿Cómo se optimizaron recursos? En lugar de construir una red de agua potable y otra de drenaje en cada uno de los municipios, la propuesta fue construir una sola red metropolitana para el suministro de agua domiciliaria y otra, única, para el drenaje.
Se trataba de municipios conurbados que podían tener redes comunes. ¡Ojo!, esta es la clave, lo intermunicipal es lo común, lo común significa una misma instalación, no un mismo problema.
El servicio de limpia es distinto al del agua y drenaje, no se pueden manejar con la misma fórmula. Creer que, porque todos los municipios tienen problemas con la recolección de la basura, debe tratarse esta, como problema común, en el mejor de los casos es ignorancia. Ni los camiones recolectores, ni los inútiles “puntos verdes”, ni las plantas de transferencia, tratamiento o eliminación final, son comunes a todos.
Eventualmente, una planta de eliminación de residuos sólidos puede atender a dos municipios, pero nunca a todos, en ese caso bastaría un convenio entre los dos ayuntamientos interesados, no una metropolización, porque al emplazarse lejos del lugar de recolección, los costos por trasporte lo hacen insostenible.
Permítame insistir, es un asunto de economía y eficiencia institucional, no de modas globales. Ni la basura ni la gente cochina es el problema, los ayuntamientos deben mantener, en todo tiempo, limpias las ciudades, a pesar de los pesares, el problema en realidad es la ineptitud de los encargados en los gobiernos, la solución real va en sentido contrario a la metropolización, conocer el enfoque administrativo fractal les daría luz. Si no desechan ese despropósito antes de implementarlo, lo tendrán que hacer después, cuando entiendan que no sirvió y se haya dañado, aún más, la precaria economía municipal. El SIAPA de la basura, será más basura. Ni hablar.