El guitarrista originario de La Barca, alienta a quienes sienten curiosidad por el género
Por: Lucia Castillo
Es una mañana de domingo en una casa de La Barca, Jalisco. David Briseño Ceja, de 15 años, entra a su sala y encuentra a su papá escuchando un sonido gutural, veloz, con la guitarra de protagonista. El adolescente, de unos 14 o 15 años había sido tecladista de una agrupación que tocaba la música de moda en los años 90 (Mi Banda el Mexicano, Banda Machos, Banda El Toro). Pero ese día abrió los oídos a un nuevo sonido: la música de metal.
“Fue un ¡baaang! directo a mi cabeza, y la primera banda y canción que escuché fue a Megadeth con su canción Symphony of Destruction, yo no cabía en el asombro que esta “nueva” música estaba llegando a mis oídos, después de eso mi papá puso a Metallica, Pantera, Sepultura, Slayer, Testament y justo en ese momento decidí que era la música que quería escuchar de ahí en adelante”, narró el hoy guitarrista de la banda de death metal All Misery, con la cual lleva 8 años y están por publicar un nuevo álbum este año y por realizar una gira en todo el país.
David es barquense de origen pero actualmente vive en Zapotlanejo con su esposa, hijo e hija. A este municipio llegó por primera vez con Arcadia Libre, grupo ocotlense de metalcore en el que fue también guitarrista. Los primeros escenarios que pisó en tierras tecuexes fueron el del Urban Bar, espacio de expresión de música rock, metal y ska, y el desaparecido Coyote Inválido. En Zapotlanejo David también co-fundó BMR en 2014, banda de Nu Metal que actualmente integran él junto con Adolfo Torres (Voz), Raúl Jiménez (Guitarra), Carlos De La Torre (Bajo), Hernán Alcaraz (Batería) y Allan Tejeda (Guitarra).
“Hemos tenido una gran aceptación donde nos hemos presentado con grandes tours, incluso uno en Centroamérica, shows en foros importantes y con un EP y sencillo publicado, lo que buscamos en los próximos meses es tener shows, formar parte de festivales y estamos ya preparando nuestro más reciente material”, explicó Briseño sobre BMR.
Bajo el nombre “David Briseño”, el metalero también tiene un proyecto individual con tres tracks publicados y 2 videos oficiales: “Ower” y “TranquilaMente”.
“Considero que esta pandemia me ayudó a animarme a mostrar hecho algo bajo mi propio nombre y el resultado ha sido bastante bien recibido por la gente que me apoya, me sigue y mejor aún por personas nuevas que descubren mi música y comparten lo que hago. Con David Briseño ya tengo un EP grabado y, es probable, solamente se saquen sencillos de manera periódica para tener material vigente durante el año, busco grabar un nuevo video y sacar un nuevo sencillo en los meses próximos”
¿HAY ESCENA DE METAL EN ZAPOTLANEJO?
El metal en Zapotlanejo no es un género nuevo, ni tampoco tan popular como la tradicional banda, los corridos o el reguetón: desde hace años ha habido personas con este conocimiento musical.
“De repente los hombres se hacen cierta idea de que una mujer que escucha metal puede ser una mujer fácil o promiscua. Los comentarios típicos de "ya se acabó el halloween", "dónde va a ser el funeral", o incluso personas que se persignan cuando vas pasando, o que se bajan de la banqueta cuando te ven que vas a cruzar junto a ellas”, expresó Edisa Íñiguez, mujer zapotlanejense, psicóloga, metalera.
“Hay mucha gente con este gusto y es padre cuando vas a un concierto y te topas a gente de Zapotlanejo que no sabías que le gustaba el metal. En Zapotlanejo hemos tenido buenos toquines como los que había en el Hollywood, a donde llegó a venir Eva Lumbre y varias bandas de metal de Guadalajara. Tuvimos la suerte de tener desde Argentina a A.N.I.M.A.L. o el festival de motociclistas de Zapotlanejo, cuyos organizadores llegaron a traer a Luzbel y a Megaton”, recordó Juan Javier Delgadillo, originario de este lugar, contador y experto en este género musical.
"Escuchar metal es mi gusto y va evolucionando también, más gente lo va aceptando.
Simplemente, en mi casa mis papás no eran de esos gustos, cuando era más joven lo veían más raro, ya después con el tiempo se fueron acostumbrando un poco más y en vez de regañarme diciendo: "no compres esos discos", más bien era: "¡ya prendiste la licuadora otra vez, nomás se oye ruido!", y cosas así.
Yo pienso que si te gusta no tienes por qué tener miedo a expresarlo. El gusto que tengas es tu gusto y es parte de tu personalidad y se refleja en todo lo que haces", consideró el arquitecto Gerardo Aceves, gran conocedor del metal y sus derivados.
Y para el Químico- Farmacobiólogo David Briseño, el metal “es un género incomprendido”: “Tienes qué escucharlo, tienes qué vivirlo... (yo) lo definiría como un golpe que va a sacudir toda tu humanidad, las sensaciones que se perciben al oírlo inundan todo tu ser, es una música que se apodera de todos tus sentidos y pone tu cerebro en un estado de alerta, no es un género lindo y no busca serlo, generará en ti un sentimiento de querer liberar todo el estrés que tienes, tirar dos tres cosas de tu sala y mover la cabeza al ritmo de las guitarras”.
